El sábado 24 de julio, en horas de la mañana, se llevó a cabo el tradicional cuentacuentos en el Salón Pérez Uribe, como parte de las colonias de vacaciones. La convocatoria fue un rotundo éxito, dentro de las presencias permitidas a causa del coronavirus.
Los niños disfrutaron de las narraciones a cargo del Teatro con Botas, integrado por Annia Sánchez y Antonio Carnet; prestaron atención a cada relato con devoluciones espontáneas sobre lo escuchado. De eso se trata precisamente esta actividad, de abrir el corazón de los niños e invitarles a pensar.
Su función principal es proporcionar emociones, nutrir y estimular el espíritu; ejercitar los músculos emotivos de la inteligencia, potenciar la imaginación, despertar el espíritu creador y formar hábitos de atención.
Objetivos cumplidos a cabalidad, ya que se vieron niños escuchando atentamente, aportando sus conocimientos cuentistas, bailando, riendo, pasando tiempo de calidad acompañados de sus padres.
Definitivamente, contar un cuento es el acto de amor más grande que existe y tiene un sinfín de beneficios, ya que los chicos aprenden el valor de ser buenos seres humanos y moralejas; es un medio útil para transmitir valores, como la generosidad, la paciencia, el perdón, la fortaleza; siembran semillas en las personas que van a ir diseminando por donde vayan.
¡A través de los cuentos se puede hacer del mundo un lugar mejor!
