Candela Belén Francisco Guecamburu

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Es una de las jugadoras argentinas más prestigiosas y de proyección sudamericana. A sus 17 años, ya se ha convertido en Gran Maestra, siendo la tercera en la historia de su país y la número 1 entre las mujeres de todas las edades en Argentina. Este logro fue posible gracias a su talento y, sobre todo, a su dedicación al estudio. “Sin estudio, el talento es en vano”, admite en una entrevista realizada para el Club Centenario, en la cual su madre, Lorena, con amabilidad y orgullo, ayudó a coordinar. 

Candela cree que, además del talento y el estudio, la concentración, constancia, perseverancia, ánimo, actitud y pasión juegan un papel crucial en su éxito. Sin duda, esta joven está dejando una huella significativa a nivel internacional, como lo demuestran sus excelentes resultados en importantes competiciones, que la llevaron a posicionarse como la número 1 en el Ranking Elo de Argentina, con un puntaje de 2.345, por ejemplo.

Entre sus logros destacados, ostenta el título de campeona continental superior, obtenido en La Habana, Cuba, en mayo de este año. Su talento se vio en nuestro país al coronarse subcampeona Zonal 2.5, 2023, y en el 2016 fue campeona sudamericana Sub 16, en otro evento realizado en la ciudad de Luque el año pasado. En Santa Cruz, Bolivia, consiguió el título de campeona sudamericana categoría Sub 20, y en Montevideo, Uruguay, el de campeona panamericana Sub 16. Además, ha sido tetracampeona en Argentina en las categorías Sub 12, Sub 14 y Sub 16. En Guayaquil, Ecuador, alcanzó el subcampeonato panamericano, y en Buenos Aires, el de campeona sudamericana Sub 14 a ritmo pensado y título en Blitz. Otro logro notable fue en Santiago de Chile, donde se proclamó campeona panamericana en la Sub 12.

Las medallas no faltan entre sus éxitos. En el 2019 recibió medalla de oro en los torneos bonaerenses y doble medalla de oro en los Nacionales Evita, tanto en la competencia individual como en equipo, ambos realizados en Mar del Plata en el 2019. Y en el 2017, recibió doble medalla de bronce en el Sudamericano Sub 12 de pensado y Blitz en nuestro país.

Su habilidad estratégica y agudeza táctica igualmente se vieron en competencias online, cosechando el título de subcampeona mundial en Blitz en el 2022.

Las anécdotas no faltan en su trayectoria en el deporte ciencia. Recuerda una en especial: “En mi primer torneo panamericano, vi en el lobby del hotel a un profesor preparando a su alumna para el día siguiente. Y noté que era algo parecido a lo que yo jugaba. Ya estando en la habitación, le dije a mi mamá que no podía dormir si no le consultaba algo. Entonces, tomé el ascensor y me acerqué a preguntarle. Gracias a él, conocí al que hoy es mi querido club, Ajedrez Martelli”.

Comienzos

Su primer tablero le regalaron en una Navidad, “cuando tenía 4 o 5 años”. Sin embargo, dice que no aprendió nada sobre el juego en ese momento. “Quedó guardado unos cuantos años más. Fue recién a los 9 años cuando empecé a interiorizarme en el juego. Ese mismo año jugué mi primer torneo a ritmo pensado”.

En su trayectoria, no tuvo un referente femenino. “Honestamente, nunca tuve referentes femeninos. Si tuviera que mencionar a alguien, probablemente, sería Judit Polgar”, confiesa.

Añade que, en general, intenta tomar las cosas positivas y las virtudes de cada jugador y sumarlas a sus estudios y conocimientos. “Pero admiro mucho a Magnus Carlsen”, afirma.

Justamente, le encantaría jugar una partida con este Gran Maestro noruego, conocido como el “Mozart del ajedrez” y coronado como decimosexto campeón mundial, con un coeficiente intelectual de 186, solo un punto menos que el de Albert Einstein.

Considera que desde que descubrió el juego, ha sentido una gran pasión por él. “Lo disfruto mucho, por eso sigo jugando hasta el día de hoy. De hecho, tengo algo claro, y es que cuando deje de disfrutarlo, ahí tendré que hacer un stop”.

Es esa misma pasión la que busca transmitir a los jóvenes.

 

Presencia femenina

Para Candela, competir con varones y ganar no le supuso ninguna motivación especial. “Realmente no”, responde al ser consultada sobre el tema. “Cuando uno juega, sea contra quien sea, siempre quiere ganar, y eso es independiente de la persona, ya sea mujer u hombre, si es más chico o más grande, es irrelevante. Al menos, personalmente, que soy muy competitiva, quiero ganar a toda hora y contra cualquier persona que tenga enfrente”.

Ahora bien, ¿qué significa para ella que se enfoque la atención en su condición de mujer en lugar de en su fuerza y talento como jugadora de ajedrez? “Al haber menos mujeres ajedrecistas en comparación con los hombres, por obviedad, hace que llame la atención cuando una mujer juega un torneo. Y bueno, muchas veces el talento y el desempeño los dejan de lado, ya que les importa más el atractivo físico y la influencia de la jugadora”. 

En su opinión, la asignatura pendiente para el ajedrez femenino es lograr la igualdad de premios y condiciones en los torneos.

Ajedrez y estudios

La Gran Maestra tiene claro que su camino es el ajedrez, por lo que no le resulta difícil compaginar sus actividades cotidianas con las competencias de gran altura. Sin embargo, admite que no es lo mismo en cuanto al nivel de entrenamiento que le gustaría tener cuando se trata de sus estudios de la escuela. “Pero bueno, este año me cambié a una escuela que ofrece educación a distancia, es desde casa, así que puedo organizarme mejor con mis horarios y dedicarle más tiempo al ajedrez. Es una cuestión de voluntad, aquel que quiere algo hará lo imposible por alcanzarlo. En cuanto a la organización de los tiempos, es igual”, expresa insertando a su respuesta el emoji de alivio al haber superado una tarea difícil. 

Si bien el ajedrez tiene una gran utilidad como herramienta pedagógica para transmitir disciplina, empatía, pensamiento flexible, respeto por las normas y por el compañero, adaptación y gestión del tiempo y más, Candela asegura que esos valores los recibió en el seno familiar. “Gracias a Dios, me crié en una familia donde tenemos principios y les atribuyo a ellos esas cualidades. Además, quiero agradecerles por siempre acompañarme en mis sueños y aventuras, y por estar ahí para mí”, revela sumando un corazón a su respuesta. 

Finalmente, opina que el ajedrez “está creciendo bastante, sobre todo en niños a temprana edad, y eso es muy favorable”.

 Este crecimiento es evidente en los diferentes torneos realizados en nuestra institución, donde Candela llegará en sábado 14 octubre para demostrar su habilidad en el tablero. Sobre su visita a nuestro querido Club Centenario, comenta: “Creo que será divertido y la vamos a pasar muy bien. Además, espero poder dejar una huella positiva en cada una de las personas que se encuentren presentes”.

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