Clausura del Taller Literario

Con las palabras del presidente de nuestra institución, Eduardo María Livieres Guggiari, se dio inicio al acto de Clausura del Taller Literario, en el Salón de Honor, el día 22 de diciembre. 

expresó su satisfacción por el exitoso cierre de año, no solo en lo que respecta a cultura, sino también en lo social y deportivo. “Estamos cerrando un año muy movido, muy ajetreado en el Club, con muchas actividades en todas las áreas. Me parece excelente que culminemos este Taller Literario con el libro Jueves de seis a ocho. El Club Centenario, a través de ustedes, está colaborando con el acervo cultural de nuestra institución y del Paraguay. Quiero felicitarles a todos ustedes, a la Subcomisión de Biblioteca, a la Comisión de Cultura, sepan que el próximo año continuaremos en este mismo tren de actividades. Les insto a que sigan cultivando la actividad literaria, les vamos a apoyar con las producciones de las obras que vayan escribiendo”, afirmó.

Agregó que el diploma de reconocimiento es un acto que realiza con mucho cariño y satisfacción. “Como Club Centenario, estamos orgullosos del Taller Literario. Muchos de los aquí presentes son los fundadores, otros se incorporaron posteriormente. Realmente estamos muy orgullosos de contar con este grupo de estudio y práctica de escritura creativa”, concluyó al tiempo de desearles a los presentes unas felices fiestas.

El presidente de la Subcomisión de Biblioteca, Hagen Zárate, agradeció al presidente por el apoyo brindado a todo el sector cultural. “Culminamos la temporada con un libro escrito por quienes concurren al taller, bajo la dirección de la profesora Irina Ráfols. Agradecemos al Club Centenario y a su Comisión Directiva por el puntal de siempre”.

Igualmente, Ida de los Ríos hizo uso de la palabra, expresando su agradecimiento a la Comisión Directiva y a la Comisión de Cultura. “Este taller reúne a la gente que quiere poner una palabra al lado de otra, ya que una palabra escrita al lado de otra siempre es un compromiso con el pensamiento, con la sociedad. Es un poco de audacia escribir en un país donde la mitad de la gente no lee y la otra mitad no entiende lo que lee. Entonces, escribimos para un cuarto de público que disfruta leyendo y escribiendo, y que pensamos que esto debe seguir creciendo”.

Recordó a Raúl Silva Alonso, socio que dio origen al Taller Literario del Club Centenario. “Siendo un hombre optimista y soñador, quiso hacer un taller de verano, contactó a la profesora Irina Ráfols, una persona que no enseña, que inspira, que logra que las piedras escriban porque realmente tiene una enorme capacidad de inspirar y es lo mejor de un docente. Lastimosamente, Raúl ya no está físicamente con nosotros para disfrutar de su obra, pero sí está presente su hija, Soledad. No quiero que se pierda la memoria de los que dieron origen a este taller, que ya lleva ocho años de permanencia y tres libros publicados. Gracias, Raúl, estés donde estés, por hacer posible que se publique Jueves de seis a ocho. Se cumple su sueño de que sea un semillero de escritores, la semilla pasó a ser árbol que ya dio sus frutos”, puntualizó.

La presidenta de la Subcomisión de Cultura y Cine, Ana Martini, también hizo uso de la palabra, haciendo llegar a los presentes los saludos de la presidenta de la Comisión de Cultura, Margarita Appleyard, quien no pudo asistir por razones de fuerza mayor. “En el Paraguay no es difícil el surgimiento, lo difícil es la permanencia y eso es lo que hay que destacar. Raúl tuvo una idea brillante y colaboró ampliamente en todo el desarrollo cultural. Es menester justipreciar que ustedes hacen posible que esto se mantenga”.

Martini se remontó a los comienzos del Club Centenario, en el año 1937, dos años después de terminada la guerra, justamente con el objetivo de aportar una civilidad, una paz y la idea de una societariedad criteriosa. “Claramente, el estatuto establece que es un club social, cultural y deportivo, y que el aspecto cultural es importante desarrollar porque de él se abreva todo lo demás. Felicito y señalo la necesidad de que este taller permanezca en el tiempo, así como ha permanecido el ciclo de Miércoles Culturales. Es un desafío y más todavía en una cultura escrita, donde intermedia un código, y en el Paraguay tenemos también un código lingüístico-guaraní. Les insto a publicar más de un libro al año. Un orgullo para el Centenario que estén ustedes”.

La profesora Irina Ráfols expresó sus palabras de agradecimiento y mencionó a todos quienes hacen posible este espacio, entre ellos, a la encargada de Biblioteca, Gloria Fernández, quien con su trabajo silencioso colabora para que todo funcione de maravilla. “Agradezco por la solidaridad de este grupo humano que atesoro, la simpatía, el trabajo y la inspiración que brindan en la clase, lo que dan de sí, la mirada pícara, el aplauso de apoyo o de admiración, la sonrisa cómplice, la camaradería y el amor que todos compartimos por la escritura”.

Finalmente, recibieron sus diplomas los participantes que conforman el Taller Literario y luego compartieron un brindis de amistad.

. . .
Comparte:

© 2024 Club Centenario.

Avda. Mariscal López Nº 2351 c/ Venezuela.

_